El Buque Escuela ARM “Cuauhtémoc” volvió a desplegar sus velas y su espíritu en altamar, al arribar este sábado al muelle 86 de Manhattan, Nueva York, tras superar con éxito las pruebas de aceptación en el mar, informó la Secretaría de Marina–Armada de México.
Durante tres días de navegación ininterrumpida, el navío —orgullo de la marina mexicana— demostró su fortaleza y capacidad al someterse a evaluaciones técnicas que incluyeron maniobras de gobierno en condiciones normales y de emergencia, comprobación de su sistema propulsor auxiliar y ensayos de resistencia en su arboladura y jarcias. Cada mástil, cabo y vela fueron puestos a prueba, con resultados plenamente satisfactorios.
Estas pruebas siguieron al proceso de mantenimiento mayor realizado en los astilleros Caddell Dry Dock and Repair Co. y GMD, en Nueva York, que devolvieron al “Caballero de los Mares” a su máximo esplendor.
Desde hace 43 años, el “Cuauhtémoc” ha forjado generaciones de marinos mexicanos, convirtiéndose en emblema de disciplina y temple. Hoy, al retomar su misión como embajador flotante, reafirma no solo la preparación de su tripulación, sino también el compromiso de México con la tradición naval y con el mensaje de buena voluntad que lleva a los puertos del mundo.
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