En medio de un escenario político marcado por la ruptura con el Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) reiteró su disposición a construir coaliciones con otras fuerzas opositoras y con la ciudadanía.
Durante la instalación del IX Consejo Político Nacional, el dirigente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, aseguró que el tricolor está preparado para competir como una fuerza política independiente, “fuerte y competitiva”, pero subrayó que no descarta acuerdos más amplios si existe voluntad de diálogo.
Moreno enfatizó que el objetivo de las alianzas no es únicamente electoral, sino también la construcción de un proyecto de unidad que permita enfrentar los desafíos del país.
“Podemos e iremos a la contienda como una fuerza política fuerte, pero no descartamos que si la coyuntura y la voluntad de las fuerzas políticas que se dicen de oposición están dispuestos a construir, podremos levantar la coalición político-ciudadana más importante de la historia del México moderno”, declaró ante la militancia.
La postura del PRI contrasta con la decisión del PAN, cuyo presidente nacional, Jorge Romero, ha rechazado públicamente cualquier alianza formal con el priismo, apostando por relanzar al partido con una estrategia propia y cambios estatutarios que marcan distancia de las coaliciones previas.
En este contexto, el PRI busca mantener su narrativa de apertura y resiliencia, presentándose como un partido “inmortal” y dispuesto a sumar esfuerzos más allá de las diferencias partidistasPuente Libre.
El llamado de Moreno refleja la intención del tricolor de reposicionarse como un actor clave en la oposición, incluso sin el respaldo del PAN.
La insistencia en coaliciones político-ciudadanas apunta a tender puentes con otras fuerzas y sectores sociales, en un intento por consolidar un frente amplio que pueda competir en las próximas elecciones.
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