En una sesión extraordinaria del Knesset, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ofreció un emotivo discurso en el marco de la visita del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a Jerusalén, celebrando la liberación de todos los rehenes israelíes y el fin de la guerra contra Hamás, tras dos años de conflicto.
Netanyahu abrió su intervención con un mensaje de gratitud y reconocimiento:
“Presidente Trump, bienvenido a Jerusalén, nuestra capital eterna. Usted será recordado en la historia del pueblo de Israel. Gracias por ayudarnos a traer de vuelta a nuestros hijos. Gracias por ayudarnos a alcanzar la paz”, declaró entre aplausos de pie de los legisladores y diplomáticos presentes.
Reconocimiento a la gestión estadounidense
El primer ministro subrayó que la liberación de los rehenes fue posible gracias a la “presión militar sostenida de Israel” y al “liderazgo decisivo” del mandatario estadounidense, a quien llamó “el mejor amigo que Israel ha tenido jamás en la Casa Blanca”.
Agradeció a Trump por su apoyo a Israel en momentos críticos, destacando su retiro del acuerdo nuclear con Irán, el reconocimiento de Jerusalén como capital israelí, la soberanía sobre los Altos del Golán y la promoción de los Acuerdos de Abraham.
“Ningún presidente estadounidense ha hecho tanto por Israel. Ni siquiera cerca”, sentenció Netanyahu.
El fin de una guerra de dos años
Netanyahu recordó que el conflicto iniciado el 7 de octubre de 2023, tras el ataque de Hamás, dejó cerca de dos mil soldados israelíes caídos y miles de heridos.
“Pagamos un precio muy alto, pero nuestros enemigos entienden ahora que Israel es fuerte y está aquí para siempre. Esa es la base de la paz: una paz a través de la fortaleza”, afirmó.
El primer ministro rindió homenaje a las familias de los soldados fallecidos y a los sobrevivientes de los ataques iniciales, a quienes calificó como “el espíritu eterno de Israel”. Durante su discurso, pidió un minuto de silencio por las víctimas y los héroes que “hicieron posible este día”.
“Una paz a través de la fuerza”
Netanyahu destacó que el acuerdo final con Hamás —logrado tras semanas de negociaciones lideradas por Washington— permitió la entrega de todos los rehenes vivos y la rendición del grupo islamista, lo que marca, según dijo, “el inicio de una nueva era de estabilidad en Medio Oriente”.
“Los próximos años deben ser los años de la paz. Israel extiende su mano a todos los que deseen unirse al círculo de paz. Con el presidente Trump, lograremos lo que muchos creían imposible: una paz duradera entre la civilización y la barbarie”, sostuvo el mandatario israelí.
Propuesta para condecorar a Trump
En un gesto sin precedentes, Netanyahu anunció que propondrá otorgar a Donald Trump el “Premio de Israel”, la máxima distinción del país, por su “amistad extraordinaria y liderazgo en favor del pueblo judío y la paz regional”.
“Cuando otros fueron débiles, usted fue fuerte. Cuando otros nos abandonaron, usted permaneció con nosotros. Por parte del gobierno y del pueblo de Israel, gracias, señor presidente”, concluyó Netanyahu.
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