En un firme pronunciamiento, Luisa María Alcalde Luján, presidenta nacional de Morena, condenó el uso político del asesinato de Carlos Manzo Rodríguez, presidente municipal de Uruapan, Michoacán, ocurrido el pasado 1 de noviembre durante la inauguración del Festival de Velas. Alcalde llamó a la unidad nacional y exigió justicia ante el crimen que ha sacudido a la sociedad michoacana.
Tragedia en Uruapan: un llamado a la justicia
El asesinato de Carlos Manzo, quien gobernaba Uruapan desde septiembre de 2024, se perpetró en plena vía pública mientras encabezaba un evento cultural por el Día de Muertos. Sujetos armados lo atacaron a balazos, provocando su fallecimiento en el hospital Fray Juan de San Miguel. El regidor Víctor Hugo de la Cruz también resultó herido, aunque se encuentra fuera de peligro.
Las autoridades del Gabinete de Seguridad confirmaron que uno de los agresores fue abatido y dos más fueron detenidos. La Fiscalía General del Estado de Michoacán calificó el ataque como directo y vinculado a grupos delictivos que operan en la región, conocida por su actividad agrícola y por enfrentar extorsiones del crimen organizado.
Luisa Alcalde: “No a la politiquería”
Desde sus redes sociales, Luisa Alcalde expresó su indignación por el asesinato y pidió evitar que este doloroso hecho se utilice con fines políticos. “Poco abonan los que utilizan estos dolorosos hechos para hacer politiquería. Hoy debe unirnos la búsqueda de la verdad y sobre todo de la justicia”, escribió la dirigente morenista.
Asimismo, manifestó su confianza en el compromiso de la presidenta Claudia Sheinbaum y del Gabinete de Seguridad para esclarecer los hechos. “En nuestro movimiento condenamos toda forma de violencia y lamentamos profundamente el asesinato del Presidente Municipal de Uruapan”, añadió.
Contexto de violencia y exigencia ciudadana
Carlos Manzo, alcalde independiente, había denunciado públicamente la presencia del crimen organizado en Uruapan y solicitado apoyo a los gobiernos estatal y federal. Su muerte ha generado indignación entre los habitantes del municipio, quienes exigen mayor seguridad y justicia para los responsables.
El caso se suma a una preocupante ola de violencia contra autoridades locales en México, lo que ha encendido las alarmas sobre la vulnerabilidad de los funcionarios públicos frente al crimen organizado.
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