El caso del bebé abandonado en calles de Tultitlán, Estado de México, dentro de una bolsa de plástico a principios de año, ha llegado a una resolución definitiva: el menor será dado en adopción.
La decisión fue tomada por la jueza octava de distrito, Gabriela Villeda, luego de que la abuela paterna no acudiera a las citas programadas para reclamar la custodia.
El pequeño, identificado como Lucio, fue abandonado por su padre en febrero de 2025 y desde entonces permanecía bajo resguardo del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM). Durante el proceso legal, se evaluó la posibilidad de que sus abuelos pudieran asumir la tutela, pero finalmente fueron descartados al no cumplir con los requisitos ni presentarse de manera constante.
La jueza explicó que el interés superior del menor es garantizarle un entorno seguro y estable, con derecho al amor y a una familia. “Nuestro interés es que él esté bien y que tenga derecho al amor, a una familia”, declaró Villeda en entrevista televisiva.
El abandono del recién nacido fue documentado por cámaras de seguridad, lo que permitió la captura del padre, Lucio “N”, actualmente procesado junto con la madre por delitos relacionados con el abandono y la omisión de cuidados.
Tras nueve meses de custodia estatal, el bebé será integrado al Sistema Nacional DIF en Toluca para iniciar el proceso formal de adopción. El organismo será el encargado de seleccionar a la familia que cumpla con los requisitos legales y emocionales para ofrecerle un hogar definitivo
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