El Senado de la República inició este jueves la discusión de la minuta de la Ley General de Aguas y las reformas a la Ley de Aguas Nacionales, enviada por la Cámara de Diputados tras más de 24 horas de debate legislativo.
La sesión arrancó en el Pleno con carácter de urgente resolución, dispensando trámites y sin pasar por comisiones, lo que generó inconformidad en las bancadas opositoras.
La minuta fue recibida a las 14:32 horas y, tras un receso, la presidenta de la Mesa Directiva, Laura Itzel Castillo, informó que se procedería a su discusión inmediata.
Con 83 votos a favor del bloque oficialista (Morena, PT y PVEM) y 27 en contra de la oposición, se abrió la ronda de posicionamientos.
El oficialismo defendió la iniciativa como un paso para garantizar el derecho humano al agua y fortalecer la rectoría del Estado en la administración de los recursos hídricos, mientras que PAN, PRI y MC denunciaron un proceso “apresurado” y sin suficiente análisis.
La nueva legislación busca regular el acceso, uso y distribución de las aguas nacionales, así como atender las demandas de sectores productivos, en especial el agrícola, que fueron incorporadas en un paquete de 18 reservas aprobadas en la Cámara de Diputados.
Sin embargo, la oposición advierte que la premura con la que se pretende aprobar la norma podría dejar vacíos legales y abrir la puerta a conflictos sociales.
El debate se da en un contexto de crisis hídrica nacional, con sequías recurrentes y presiones sobre los sistemas de abastecimiento urbano y rural.
Organizaciones civiles han pedido mayor transparencia y participación ciudadana en la elaboración de la ley, mientras que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha defendido que el nuevo marco jurídico permitirá una gestión más equitativa y sustentable.
Se espera que la discusión concluya antes de la medianoche, con una votación que podría dar luz verde definitiva a la nueva Ley de Aguas, cerrando así uno de los debates más intensos del actual periodo ordinario
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