En los últimos 15 años, México dejó de ser únicamente un país de tránsito para convertirse también en un país de destino para miles de personas con necesidades de protección internacional.
Este giro, impulsado por cambios en las dinámicas migratorias regionales y por la evolución del sistema de asilo nacional, fue documentado en el estudio “ACNUR en México, de la emergencia a la institucionalización, 2010–2025”, presentado por el Colegio de la Frontera Norte (COLEF) con el respaldo de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
El informe preliminar destaca que la consolidación del sistema de asilo mexicano y el fortalecimiento de la asistencia humanitaria han sido factores clave para ampliar la capacidad de recepción e integración del país.
En particular, el apoyo sostenido de ACNUR a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) permitió responder al crecimiento exponencial de solicitudes de asilo a partir de 2018.
Entre 2018 y 2025, ACNUR destinó más de 600 millones de pesos a la COMAR, lo que representó en promedio más del 60% de su presupuesto anual.
Esta inversión se tradujo en mejoras en registro, procesamiento de solicitudes, apertura de oficinas y fortalecimiento institucional. “Sin este respaldo, la capacidad de respuesta del sistema habría estado seriamente comprometida”, señala el estudio.
Además, entre 2022 y 2025, ACNUR firmó 133 acuerdos de colaboración con organizaciones de la sociedad civil en todo el país, con una inversión total de 1,114 millones de pesos.
Estas alianzas abarcaron asistencia legal, psicosocial, humanitaria y apoyo a albergues, beneficiando a miles de personas desplazadas.
La presentación del estudio estuvo a cargo del Dr. Rafael Alonso Hernández, coordinador del Doctorado en Estudios de Migración del COLEF, en un conversatorio que reunió a representantes del Gobierno de México, academia, sociedad civil, el Sistema de Naciones Unidas y población refugiada.
Peter Grohmann, Coordinador Residente del Sistema de la ONU en México, subrayó: “En este 80 aniversario de la ONU, reafirmamos un principio simple pero poderoso: proteger a quienes buscan protección es un deber compartido. Lo fue en 1945 y lo sigue siendo hoy”.
Giovanni Lepri, Representante de ACNUR en México, advirtió que la agencia enfrentará una etapa de reducción operativa a partir de enero de 2026.
“No tendremos 35 acuerdos con socios ni tantas oficinas. Este estudio busca dejar ideas para construir un sistema donde las personas refugiadas puedan acceder a sus derechos si los actores públicos y privados trabajan juntos y en la misma dirección”, afirmó.
El informe completo será publicado en diciembre. Mientras tanto, el resumen ejecutivo ya está disponible para consulta pública. ACNUR espera que este documento sirva como referencia estratégica para orientar decisiones urgentes y sostenibles en materia de asilo y protección internacional en México.
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