La diputada Lilia Aguilar Gil (PT) propuso que la Política Nacional de Vivienda considere esquemas y mecanismos institucionales para la recuperación de viviendas en condición de abandono, con pleno respeto al principio de legalidad y bajo criterios de habitabilidad, accesibilidad y ubicación.
La iniciativa, turnada a la Comisión de Vivienda, plantea adicionar las fracciones XIII al artículo 6, XVII al artículo 8 y un último párrafo al artículo 12 de la Ley de Vivienda. Con ello, el Programa Nacional de Vivienda deberá incluir estrategias y líneas de acción específicas para la recuperación y reasignación de estos inmuebles a la población solicitante.
“El Programa Nacional de Vivienda debe contener estrategias claras para recuperar y reasignar viviendas abandonadas, evitando repetir errores del pasado que generaron deterioro urbano y conflictos sociales”, señala la exposición de motivos.
La propuesta establece que el porcentaje de viviendas en abandono sea un criterio de evaluación del cumplimiento de los objetivos del Programa y del desempeño de las dependencias responsables de su instrumentación. Reconoce, además, que no todas las viviendas en abandono son susceptibles de recuperación, por lo que se requieren parámetros claros y viables para su reincorporación al mercado habitacional.
“Es indispensable que el Estado recupere la rectoría en materia de vivienda mediante una política integral que considere no sólo el inmueble, sino su entorno urbano, la infraestructura, los servicios y la cercanía a fuentes de empleo”, subraya el documento.
Aguilar Gil enfatiza que la recuperación y reasignación debe realizarse con transparencia y certeza jurídica, evitando esquemas de intermediación que han sido ineficaces, como las subastas. “Se debe priorizar una relación directa entre los organismos de vivienda y las personas solicitantes”, apunta.
Finalmente, advierte la necesidad de establecer candados para que el problema no se repita: “La política de vivienda debe cambiar para garantizar que las personas beneficiadas tengan la certeza de haber encontrado un patrimonio que les brinde todos sus derechos”.
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