En respuesta al asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo modificó de manera urgente su agenda oficial, trasladando la conferencia matutina del lunes al Palacio Nacional.
El evento estaba originalmente programado para realizarse en el Complejo Cultural Los Pinos, como parte de una serie de actividades relacionadas con el Mundial de Fútbol 2026.
Carlos Manzo, alcalde independiente de uno de los municipios más golpeados por la violencia en Michoacán, fue asesinado mientras participaba en una celebración pública.
El atentado, que ocurrió en el primer cuadro de Uruapan, ha generado una fuerte reacción política y social, reavivando el debate sobre la seguridad en el país.
La Presidencia de la República informó que el cambio de sede busca garantizar condiciones de seguridad y control ante el clima de tensión generado por el crimen.
La “Mañanera del Pueblo”, como se había denominado el evento en Los Pinos, será reemplazada por una conferencia tradicional en el Salón Tesorería del Palacio Nacional.
Durante su intervención, Sheinbaum expresó su “absoluta firmeza” para que no haya impunidad en el caso y reafirmó el compromiso de su gobierno con el fortalecimiento de las estrategias de seguridad en Michoacán y otras regiones afectadas por el crimen organizado.
El asesinato de Manzo no solo sacude el panorama político local, sino que también pone en evidencia los desafíos que enfrenta el nuevo gobierno federal en materia de seguridad.
Uruapan ha estado en el foco de la violencia durante más de una década, y este nuevo episodio podría marcar un punto de inflexión en la relación entre el Ejecutivo y los gobiernos estatales y municipales.
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